Los primeros días de mayo han sido extremadamente difíciles para los pueblos indígenas. La pandemia del Covid-19 crece cada día en todo el Brasil y nos afecta violentamente, hermanos indígenas, pues nos encontramos entre los grupos vulnerables para esa enfermedad. Nosotros, de la Articulación de los Pueblos Indígenas de Brasil (APIB), registramos hasta el día 11 de mayo, 77 muertes y 308 indígenas afectados por la enfermedad. En total, son 34 pueblos afectados directamente por la enfermedad y la mayoría de los casos están en la Amazonia.
És brutal la velocidad con que registramos el aumento de casos de muertes entre los pueblos indígenas, en poco más de una semana identificamos más 49 óbitos de parientes- llegamos hasta la media de cuatro muertes indígenas cada día.
El mes de mayo es apuntado por especialistas como el período de mayor contaminación de la enfermedad y cerca de 81 mil indígenas de 230 regiones se encuentran amenazados por el nuevo coronavirus, según el estudio. El gobierno de Bolsonaro no ha adoptado medidas eficaces de protección y aún ha publicado dos acciones que empeoran la violencia contra los pueblos indígenas: la Medida Provisional 910, que está en proceso de votación en el Congreso Nacional; y la Instrucción Normativa nº 09 de la Funai, emitida el 22 de abril. Las dos medidas llenan las expectativas del agronegócio y privilegian los acaparadores de tierra.
Mientras tanto, en la última semana hubo algunas victorias del movimiento indígena: el STF suspendió los procesos judiciales de recuperación y anulación de tierras indígenas durante la pandemia del Covid-19 y suspendió el Dictamen 001 que utilizaba el marco provisional para obstaculizar las demarcaciones de tierra indígena.
Nosotros, de la APIB, realizamos la Asamblea Nacional de la Resistencia Indígena en los días 8 y 9 de mayo para crear un plan de enfrentamiento a la pandemia, específico al contexto de los pueblos indígenas. Es una de las maneras de cobrar del Gobierno la adopción de medidas urgentes. Creamos un comité nacional, con nuestras organizaciones de base, para observar la evolución de los registros de los casos de Covid-19 entre los pueblos indígenas y, así, denunciar los casos que fueron invisibilizados por el Gobierno, ya que no acompaña, ni tampoco registra indígenas que viven en el contexto urbano.
#coronavirus #vidasindigenas